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El Superior Tribunal de Justicia concluyó con el proceso de despapelización en el fuero penal al acordar que, a partir del 1 de noviembre próximo, todas las causas se tramitarán electrónicamente a través del llamado Sistema Informático de Gestión de Legajos Penales.

El abandono del formato papel no se dio de un día para el otro, sino que se trató de un proyecto gradual que se ha venido desarrollándose en el tiempo. Así, cuando el 1 de marzo de 2011 entró en vigencia el actual Código Procesal Penal provincial, para su implementación operativa, se desarrolló el novedoso Sistema Informático de Gestión de Legajos Penales con recursos humanos y tecnológicos propios.

Luego, con los aportes de los propios usuarios, el sistema se fue mejorando y adecuándose a las necesidades del propio proceso penal. En esa etapa inicial fue utilizado por los operadores internos del fuero, luego por los externos y, desde el 1 de octubre de 2014, se sumó el procedimiento de notificación electrónica voluntario.

Más acá en el tiempo, a fines de 2016, el Superior Tribunal de Justicia dio otro paso al poner en marcha el mecanismo de expedición de órdenes de allanamiento por vía electrónica. Actualmente el SIGeLP es utilizado por la inmensa mayoría de los actores que intervienen en los legajos penales, por lo que ya es una práctica generalizada y asumida por los operadores.

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